Centenario de Santa Rafaela María: “Mujer que dio la vida porque comprendió que la Eucaristía no es una celebración solamente, es la entrega diaria de la vida” Cardenal José Cobo
Pilar Algarate 23 de Enero de 2025
El 23 de enero, la catedral de la Almudena acogió la Eucaristía conmemorativa por el centenario de la muerte de Santa Rafaela María, fundadora de las Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús. La celebración, presidida por el cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid, reunió a religiosas, sacerdotes, laicos y miembros de diversas comunidades que, inspirados por el legado de esta santa, quisieron rendir homenaje a su vida y obra.
En su homilía, el cardenal destacó la relevancia del carisma de las Esclavas en el contexto actual, haciendo énfasis en su misión de adoración y reparación, así como en su labor al servicio de la Iglesia y las personas más necesitadas. “Confiar en Dios, mirar arriba sin dejar de mirar este mundo que Él ama, es el gran aprendizaje que nos deja Santa Rafaela María”, afirmó.
Cáritas diocesana de Madrid estuvo presente en esta celebración, testimoniando la cercanía y colaboración de las Esclavas en diversos proyectos. Uno de ellos es la Comunidad de Vida en el centro residencial “Sínodo 2005”, donde se acompaña a familias en situación de vulnerabilidad.
El cardenal Cobo subrayó que el compromiso de las Esclavas con la adoración al Santísimo y la reparación de las heridas de un mundo marcado por el sufrimiento y la indiferencia, es profundamente contracultural y profundamente cristiano. “Adorar es descubrir la desproporción del misterio de Dios, y reparar es reconstruir la imagen de Dios en cada persona, especialmente en los corazones rotos por el dolor y la injusticia”, afirmó.
En este centenario, Santa Rafaela María es recordada no solo como una mujer de fe profunda, sino como un testimonio vivo de que la Eucaristía no es solo una celebración, sino una entrega diaria de la vida. En palabras del cardenal: “El bien nunca desaparece y siempre florece. Hoy estamos aquí como fruto de su vida sembrada en las manos de Dios”.
Al finalizar, el cardenal invitó a todos los presentes a seguir el ejemplo de la santa: vivir desde el amor, la adoración y la reconciliación, siendo testigos del Evangelio en el mundo actual.
Cáritas diocesana de Madrid se une a esta celebración, agradeciendo la vida y misión de las Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús, que siguen sembrando esperanza y amor en medio de las calles de nuestra ciudad.