Un huella en el corazón de los más jóvenes

Las y los jóvenes a los que Cáritas Diocesana de Madrid acompaña a través de proyecto de alojamientos para jóvenes en situación de vulnerabilidad social, han participado en una experiencia enriquecedora de ocio saludable; se trata en concreto de una salida y convivencia en Cercedilla y Buitrago de Lozoya. Todas las actividades en las que han participado en estos días se han organizado a través de la Comisión de Ocio, un espacio en el que se reúne un representante de cada piso para organizar y poner en común la propuesta.

El objetivo de esta estancia vacacional ha sido proporcionar  al grupo un espacio seguro y propicio para su desarrollo integral, brindándoles herramientas y oportunidades para desconectar de Madrid y de sus quehaceres diarios de una forma exitosa.

En Cáritas Madrid reconocemos la importancia del ocio y tiempo libre para jóvenes en proceso de inclusión, y de ahí surgen esta propuesta lúdica, donde además de divertirse, socializan, favorecen su creatividad y adquieren habilidades complementarias a su formación académica y personal.

Cercedilla, con su belleza paisajística y entorno montañoso en la Sierra de Guadarrama, y Buitrago de Lozoya, un encantador pueblo medieval, han sido la combinación perfecta entre naturaleza, cultura y diversión para esta experiencia única.

Durante tres días que ha durado la estancia, se han planificado actividades lúdicas, deportivas, culturales y de convivencia, así como excursiones por la naturaleza, juegos cooperativos y visitas a lugares históricos.

La iniciativa también ha servido para fomentar el trabajo en equipo y la colaboración entre los jóvenes, permitiéndoles fortalecer habilidades sociales y emocionales y promover su participación activa en la organización de las actividades. Así se fomenta sus capacidades de liderazgo y empoderamiento. 

Desde Cáritas destacamos la motivación y la implicación de las y los jóvenes, su nivel de participación y compromiso ha dejado una huella duradera en el corazón de todas las personas involucradas, jóvenes y equipo de Cáritas Madrid.

Los jóvenes se han mostrado, además, entusiasmados y agradecidos y han expresado su deseo de volver y disfrutar de futuras experiencias similares.