El Proyecto de Menores de Vicálvaro, de la Vicaría III de Cáritas Madrid, cuenta con un nuevo Taller de Expresión Emocional y una nueva edición de la Escuela de Familia.

El Proyecto de Menores de Vicálvaro este curso escolar ha puesto en marcha un Taller de Expresión Emocional para los más pequeños y una nueva edición de la Escuela de Familia, en la Vicaría III de Cáritas Madrid. Es un proyecto que se realiza en colaboración con el Programa CaixaProinfancia de Obra Social “la Caixa.”

Este Proyecto de Menores de Vicálvaro está formado por 30 niños con edades comprendidas entre los 3 y los 16 años inclusive, por 29 personas voluntarias, un integrador social, una psicóloga y una trabajadora social.

De este proyecto queremos destacar el nuevo Taller de Expresión Emocional, para niños de 3 a 6 años, que se ha comenzado este curso escolar cada 15 días. En este taller se pretende que los niños sepan identificar lo que están sintiendo y que puedan expresarlo de forma adecuada. Como en muchas ocasiones expresar lo que siente con palabras es complicado, mediante juegos y manualidades se les ofrece a los niños canales de expresión positiva. Mediante el juego, y las risas, los niños aprenden a identificar si un compañero está enfadado, triste, asustado o contento y el por qué de esta emoción, aprendiendo a actuar en consecuencia.

Los voluntarios, ayudan en la realización de cada una de las sesiones, a través del conocimiento que tienen sobre cada uno de los pequeños y luego intentan aplicar las técnicas en el resto de los días.

También queremos destacar la 2ª Edición de la Escuela de Familia, que abrió sus puertas en el mes de enero, en el Centro Arciprestal de Vicálvaro, todos los martes de 11:00 a 13:00. Este espacio ha sido demandado por las propias familias para poder compartir las dudas sobre la educación de sus hijos.

En esta Escuela se pretende generar un espacio de comprensión y expresión, donde poder abordar, con confianza, temas sobre el desarrollo evolutivo de los niños, etapas del ciclo vital, establecimiento de normas, límites y rutinas familiares que faciliten la confianza.

Durante cada sesión, se aborda un tema específico que se trabaja a través del coloquio, dinámicas de grupo y role-playing.

Algunas de las opiniones de las madres que acuden a la Escuela son:
“Es un espacio positivo, donde compartimos”.
“Nos ofrecen ayuda con las dudas que traen nuestros hijos del colegio”.
“Cada semana vengo porque así puedo cambiar mi rutina, y nos sentimos escuchadas”.
“Al hablarlo, me doy cuenta que no soy la única que tiene esas dudas”.