El misterio y la magia de la Navidad

Un año más, la Navidad se ha acercado al Hogar Santa Bárbara. Hemos tenido un encuentro de reflexión y fiesta junto a todos los voluntarios que durante el año aportamos nuestro pequeño grano de arena a este proyecto tan necesario como fructífero, de Cáritas Madrid.

Además de los voluntarios, estaban también el equipo promotor al completo y las madres del Hogar con sus bebés en brazos, todos vestidos con toques navideños. Nos sentíamos una gran familia. Tal y como cruzábamos la puerta nos albergaba la sensación de estar en casa… esa casa que tantos bebés ha visto y verá nacer año tras año.

Además de poder reunirnos todas las personas voluntarias, se ha contado con la presencia de José Luis Segovia, Vicario Episcopal para el Desarrollo Humano Integral y la Innovación, cariñosamente conocido como Josito, quien nos deleitó con juegos de magia, desarrollando una charla magistral sobre la ética y el transitar por la vida, con analogía a la magia. La vida no siempre es de color de rosa y los problemas no siempre se solucionan ni cuándo ni cómo nos gustaría, e iba evidenciando a través de la magia, lo que con sus palabras nos iba contando.

Teniendo en cuenta estas fechas tan especiales y que no hay encuentro o fiesta que se precie sin música. Las mamás, lideradas por una de las religiosas, Duva, han preparado un villancico. Ha sido precioso ver cómo mujeres de distintas nacionalidades e incluso, me atrevería a decir, de distintas religiones, unieron sus voces con un mismo cántico recordando al Niño Dios que nació en Belén.

Además de todos los recuerdos que cada una de nosotras nos llevamos de este maravilloso momento compartido entre todas, nos hicieron un regalo elaborado con materiales reciclados; es una bota con un lema: “Esta bota significa Esperanza y Felicidad. Cada paso que damos es un gran reto. Camina con la esperanza en tu corazón y nunca caminaras solo”.

Este es realmente un hogar.  Una posada donde durante unos meses las mamás encuentran una mano amiga y una cuidada parada para poder mejor continuar su camino. Nosotras como voluntarias ‘tenemos mucho que ver’, pero Cáritas Madrid lo hace posible.