Ascensión del Señor
Cáritas Madrid 28 de Mayo de 2017Lecturas de la Festividad de la Ascensión: (Hch 1, 1-11; Sal 46, 2-3. 6-7. 8-9; Segunda lectura; Ef 1, 17-23; Evangelio: Mt 28, 16-20)
Lecturas de la Festividad de la Ascensión: (Hch 1, 1-11; Sal 46, 2-3. 6-7. 8-9; Segunda lectura; Ef 1, 17-23; Evangelio: Mt 28, 16-20).
Cáritas Madrid. 28 de mayo de 2017.- Hoy celebramos la fiesta de la Ascensión del Señor. A los 40 días de su Resurrección, Jesús asciende a los cielos. El número cuarenta es un número bíblico que simboliza el cambio de una etapa a otra, un período completo para alcanzar la madurez hacia otra realidad. El pueblo de Israel había pasado cuarenta años en el desierto; cuarenta días estuvo Elías en el monte Horeb; Jesús pasó 40 días en el desierto hasta estar preparado para iniciar su misión. Ahora hace a los apóstoles vivir un proceso de 40 días en el que se van sucediendo las apariciones para ir preparándolos a la misión que les va a encomendar.
Cuando están preparados, Jesús pasa de la tierra al cielo, de lo finito a lo infinito, como hace cuarenta días había pasado de la vida a la muerte, del tiempo histórico a lo eterno. En el fondo son dos dimensiones de la misma realidad para expresar que Jesús pasa de esa realidad para expresar que Jesús pasa de esta realidad histórica, circunscrita un tiempo y un espacio, a una realidad diferente no sometida a esas categorías espacio-temporales: la esfera divina. Su paso nos interpela y nos invita a asumir el testigo del anuncio de su Buena Noticia: ¿qué hacéis mirando al cielo? Comienza nuestra tarea.
Para nosotros hoy es un día de esperanza y de ver la consumación de la promesa de Dios, el fin al que estamos llamados no es, y no puede ser otro que el de la plenitud, y esa plenitud no puede estar en otro sitio sino en la contemplación de Dios. No es el tiempo de quedarnos plantados mirando al cielo, sino la posibilidad de descubrir la presencia de Dios y de anunciarlo. Hoy, aunque miramos la verticalidad de la fe, no nos podemos olvidar de la horizontalidad de la misma.
"En la Ascensión de Jesús está la promesa de nuestra participación en la vida junto a Dios. Llevémosla en el corazón por los caminos del mundo"
Papa Francisco