Aprender a leer pantallas: la alfabetización digital para dar dignidad y derecho

19 de Septiembre de 2022

EL 8 de septiembre se celebraba el Día Internacional de la Alfabetización, declarado por la ONU en 1967 con el objetivo de recordar la importancia de la alfabetización como factor de dignidad y de derechos humanos para conseguir una sociedad más instruida y sostenible.

Este mes de septiembre celebramos el Día Internacional de la Alfabetización. Ese día se evalúa cómo ha mejorado la tasa de alfabetización de los países miembros en el contexto de la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible. Aunque en un principio solo se evaluaba la cantidad de personas que sabían leer y escribir en cada país, a partir del año 2017 también se sumó la alfabetización digital, es decir, la capacidad de entender y usar de forma provechosa las nuevas tecnologías. En España la tasa de alfabetización es del 98,1%, pero el apagón digital según el último informe Foessa afecta a más del 35% de la población, bien por falta de habilidades, o por no tener conexión a Internet, o por falta de dispositivo. 

Tendemos a pensar que los analfabetos digitales son personas mayores reacias al aprendizaje y uso de nuevas tecnologías; pero son las familias con falta de recursos quienes sufren especialmente la brecha digital, un problema que afecta por igual a padres e hijos. Durante la pandemia, los centros educativos impartían clases online y la Administración exigía cita previa por internet para tramitar ayudas. Esta situación excepcional puso de relieve que la formación y capacitación digital es imprescindible, igual que lo es disponer de equipos informáticos. En ese contexto pandémico, el proyecto Brecha Digital de Cáritas Madrid fue premiado por la Asociación Española de Ingenieros de Telecomunicación por “su contribución diferencial al avance de la transformación digital y a la innovación”

Hoy, en Cáritas Madrid la formación para eliminar la brecha digital ya es transversal a todos los programas de acompañamiento y atención. Además, hay una lista centralizada para que las familias puedan acceder a un ordenador o a una tableta donados por empresas privadas que colaboran con Cáritas. Inicialmente eran ordenadores de sobremesa, pero ahora se buscan más los portátiles o tabletas para que puedan conectarse al móvil, dado que muchas familias viven en una habitación o en pisos compartidos. Esto es importante, porque sin un portátil, los niños se quedan fuera del circuito educativo escolar y dejan de tener las mismas oportunidades; y los mayores, por su parte, tienen dificultades para la búsqueda de empleo, para realizar gestiones administrativas y para acceder a formación online.

Cáritas Madrid entrega los ordenadores en régimen de préstamo durante un año. Además, las vicarías disponen de un Servicio de Trámites: puntos con ordenadores para ayudar a las familias a solicitar el certificado digital, vivienda pública o cualquier otro trámite administrativo. Con los niños la formación digital se realiza en contexto escolar, a través de un temario que les ayuda a acceder a la web del colegio, a descargar los deberes, a hacer presentaciones de trabajos escolares y a colgarlos una vez realizados. De ese modo, aprenden con rapidez mientras se benefician de un refuerzo escolar que les abre un mundo de oportunidades y que mejora la socialización de todos los miembros familiares, el contacto o la comunicación con amigos, con sus familias de origen.

Todavía queda un largo camino para conseguir cifras de alfabetización digital tan positivas como las de alfabetización analógica, porque la brecha digital, como cualquier otra carencia, tiene que ver con la pobreza y la exclusión, y afecta por igual a niños y a mayores.    

 

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