ACOMPAÑAMIENTO A MENORES EN HERRAMIENTAS DIGITALES
Cáritas Madrid 2 de Abril de 2020
ACOMPAÑAMIENTO A MENORES EN HERRAMIENTAS DIGITALES
Formación on-line
Dirigido a personas voluntarias que vayan a desarrollar su tarea como monitores en un proyecto de menores.
Casi la mitad de los niños en riesgo de exclusión social no tiene ordenador ni acceso a ningún tipo de medio tecnológico para seguir las clases a distancia. Y esto puede afectar a su futuro. Antes del confinamiento, ya tenían un riesgo de repetir curso y más posibilidades de abandonar tempranamente la escuela que los alumnos de clase media. Ahora la pandemia ha ampliado la brecha.
El cierre de colegios está repercutiendo especialmente en los alumnos de familias con menos recursos, que van a incorporarse a septiembre con un retraso de seis meses en los aprendizajes consolidados.
Sin apoyo de las personas adultas
Además, no es sólo cuestión de dispositivos, sino de apoyo. La educación a distancia exige un trabajo más autónomo del alumno, que necesita el apoyo del adulto. En las clases medias cuentan con el refuerzo que los progenitores están dando, pero las familias menos favorecidas no siempre pueden hacerlo.
Además de los efectos negativos en el aprendizaje, está el desempleo, la incertidumbre económica y la inseguridad laboral que están causando un impacto en el bienestar de los niños. Las familias están transfiriendo su inseguridad a los hijos y eso está afectando a su seguridad emocional.
El propio confinamiento tampoco ayuda, porque algunas familias conviven en casas precarias, pequeñas, donde viven hacinados y sin espacio para estudiar.
Las habilidades digitales que deben saber
A la mayoría de los niños les resulta difícil incorporar las habilidades digitales por sí mismos, y aunque estas habilidades deberían promoverse en el hogar, existe una brecha generacional digital, así que ni los padres ni los docentes saben cómo preparar de manera adecuada a los niños con estas habilidades.
Además todos los niños pequeños están muy expuestos a riesgos cibernéticos como la adicción a la tecnología, el ciberacoso y el acoso sexual. También pueden absorber normas de conducta tóxicas que afecten su capacidad para interactuar con los demás. Y mientras la mayoría de los niños se enfrenta a estos desafíos, el problema se agrava en el caso de niños vulnerables, económicamente
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