“El trabajo decente es clave para la dignidad humana”, resalta monseñor Vicente Martín en el décimo aniversario de Iglesia por el Trabajo Decente
Pilar Algarate 6 de Octubre de 2024La Iglesia de Madrid celebra el décimo aniversario de la iniciativa Iglesia por el Trabajo Decente con un paseo reivindicativo.
Esta tarde, en vísperas de la Jornada Mundial por el Trabajo Decente del 7 de octubre, la Iglesia de Madrid se ha sumado a la conmemoración de la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, coincidiendo con el décimo aniversario de la iniciativa Iglesia por el Trabajo Decente (ITD). Bajo el lema «Por ti, por mí, trabajo decente», la Iglesia reafirma su compromiso con la defensa de la dignidad de las personas trabajadoras y el cuidado de todos aquellos que aún enfrentan grandes desafíos en el ámbito laboral.
La jornada ha estado marcada por un paseo reivindicativo, que ha recorrido las calles del centro de Madrid y se ha detenido en tres puntos clave: Callao, donde ha comenzado la marcha; Sol, donde los participantes han construido un muro simbólico con los obstáculos que impiden un trabajo digno; y Ópera, donde ha culminado el acto con la lectura del manifiesto y las palabras del obispo auxiliar de Madrid, monseñor Vicente Martín.
En su intervención, monseñor Martín destacó la importancia de visibilizar la centralidad del trabajo en la vida de las personas: “Lo que estamos haciendo no es más, pero tampoco menos, que visibilizar algo esencial para la vida de millones de personas como es el trabajo decente”. Asimismo, denunció las carencias estructurales del mercado laboral actual, marcado por la precariedad, la volatilidad y la escasez de oportunidades. Para la Iglesia, estas condiciones no solo afectan a la estabilidad de las personas trabajadoras, sino que debilitan los fundamentos de la justicia social.
Monseñor Martín también ha recordado las palabras del papa Francisco, quien define el trabajo decente como aquel que es “libre, creativo, participativo y solidario”, y añadió que debe ser sostenible y respetuoso con el medio ambiente, cuidando la “casa común”.
Con motivo del aniversario, el obispo auxiliar agradeció el compromiso de todas las personas e instituciones que han trabajado durante estos diez años por la dignificación de las personas trabajadoras y animó a seguir soñando con un trabajo decente para todos. “Soñar no es una ensoñación, sino imaginar otra realidad y buscarla juntos”, subrayó monseñor Vicente Martín, en referencia a la importancia de caminar juntos como comunidad en la búsqueda del bien común.
El director del secretariado de Pastoral del Trabajo en la diócesis de Madrid, Juan Carlos Antona, decía “Nuestro deseo es que todos tengan un trabajo digno y decente, donde lo más importante sea la dignidad de la persona”.
Este décimo aniversario de la ITD se convierte en una invitación a la esperanza y la acción, recordando que es posible anhelar un mundo donde todas las personas tengan acceso a un trabajo digno y justo, alineado con los valores de la justicia social y el respeto por el planeta.