"Su vida fue un continuo sí al Señor": el cardenal José Cobo, en la Eucaristía por el eterno descanso de monseñor José Antonio Álvarez

Pilar Algarate 2 de Octubre de 2025

El cardenal José Cobo presidió una Eucaristía multitudinaria en la que la Iglesia de Madrid, entre lágrimas y esperanza, dio gracias por la vida y el ministerio del obispo auxiliar fallecido.

La Catedral de Santa María la Real de la Almudena se llenó en la tarde de este miércoles de fieles, sacerdotes, religiosas, obispos y cardenales que quisieron despedir con emoción y gratitud a monseñor José Antonio Álvarez Sánchez, obispo auxiliar de Madrid, fallecido de forma repentina el pasado 1 de octubre. Entre lágrimas y con la certeza de la fe, la Iglesia de Madrid se reunió para orar por su eterno descanso y dar gracias por su vida entregada al Evangelio y a las personas más vulnerables.

“Nos reúne la sorpresa y la vulnerabilidad”

Al comienzo de la celebración, el cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid, expresó con voz entrecortada el sentir común: “La que de forma inesperada nos reúne esta tarde es la sorpresa y la vulnerabilidad que sentimos ante la pérdida de nuestro obispo José Antonio. Ha sido un día duro, pero también lleno de cariño y de fe compartida por toda la comunidad cristiana”.

La Eucaristía estuvo concelebrada por numerosos pastores de la Iglesia. Entre ellos, el presidente de la Conferencia Episcopal Española, Mons. Luis Argüello; los cardenales Carlos Osoro, arzobispo emérito de Madrid, y Baltazar Porras, arzobispo emérito de Caracas; así como los obispos auxiliares de Madrid, Juan Antonio Martínez Camino y Vicente Martín. También participaron Mons. Carlos Escribano, arzobispo de Zaragoza; Mons. Jesús Vidal, obispo de Segovia; Mons. Santos Montoya, obispo de La Rioja-Calahorra; Mons. Demetrio Fernández, obispo de Córdoba; y Mons. Ginés García Beltrán, obispo de Getafe. Se unieron además los obispos eméritos César Franco, de Segovia, y Atilano Rodríguez, de Sigüenza-Guadalajara.

Homilía: el “sí” de toda una vida

Homilía completa

En su homilía, cuya voz se entrecortaba en algunos momentos por la emoción, el cardenal Cobo recordó las horas de espera tras la noticia del fallecimiento y las vinculó al Evangelio:

“Cuando esta mañana, entre el dolor y los silencios, esperábamos largas horas, se me venía a la cabeza el Evangelio que llama continuamente a la vigilancia: ‘Tened ceñida la cintura y encendidas vuestras lámparas’ (Lc 12,35). Pensaba que podíamos incorporarlo esta tarde. Pero el ritmo de la comunidad cristiana es más sabio, y hoy el Evangelio del día recogía lo que estábamos viviendo y lo que hemos vivido. Recoge el mismo lema episcopal de José Antonio: ‘Sígueme’”.

El arzobispo explicó que esta llamada del Evangelio “nos recuerda la actitud del que está listo, del que vive en vigilancia, del que no se acomoda ni se duerme en la rutina. Así ha vivido José Antonio: con la disposición constante al servicio, con prontitud para anunciar el Reino y con fidelidad en cada una de las etapas en que ha dicho ‘sí’ a la llamada del Señor”.

El cardenal Cobo subrayó que del testimonio de monseñor Álvarez la diócesis recibe tres llamadas: cuidarnos unos a otros, buscar lo verdaderamente importante y confiar en el Señor, que transforma el dolor en esperanza.

En un momento especialmente emotivo, se dirigió a la madre de monseñor Álvarez, presente en la celebración: “Ángela, puedes estar orgullosa de tu hijo. Damos gracias a Dios por él y sabemos que, desde su presencia en el Señor, seguirá ayudándote. Y también nosotros te acompañaremos”.

Condolencias desde Roma y de autoridades civiles

El Papa León XIV  llamó personalmente al cardenal José Cobo para transmitir sus condolencias y su oración por monseñor Álvarez y por toda la Iglesia de Madrid. También han hecho llegar su pesar distintas personalidades públicas, entre ellas el alcalde de Madrid, que se unió al dolor de la diócesis y expresó su reconocimiento a la labor pastoral del obispo fallecido.

Una despedida entre lágrimas y esperanza

La celebración concluyó en un clima de oración y recogimiento. La catedral, llena hasta los últimos bancos, fue testigo de una comunidad conmovida pero también fortalecida en la fe.

El cardenal Cobo cerró la Eucaristía con palabras de confianza: “La fe no elimina el dolor, pero lo transforma en esperanza. Hoy damos gracias a Dios por la vida y el ministerio de José Antonio, y lo encomendamos al Señor, confiando en que su semilla seguirá dando fruto en esta diócesis”.

Cáritas Madrid se une a la esperanza que no defrauda, confiando en la promesa de la vida eterna, y eleva su oración agradecida por su memoria y testimonio de servicio.

Carta de condolencias al cardenal arzobispo de Madrid José Cobo

El director diocesano de Cáritas Madrid, Luis Hernández Vozmediano, transmitió personalmente sus condolencias al cardenal José Cobo en nombre de toda la familia de Cáritas. En su mensaje, expresó el pésame y el afecto a la familia de monseñor Álvarez, agradeciendo “su cercanía y su atención a las comunidades cristianas y a las personas en situación de vulnerabilidad”, y pidiendo al Señor que lo acoja en su misericordia.

 

Galería multimedia

#JoseAntonioAlvarez #ObispoAuxiliar
Volver