El Día Internacional del Trabajo se celebra en la Almudena con una Eucaristía centrada en la dignidad, la justicia y la esperanza

Pilar Algarate 1 de Mayo de 2025

Con motivo del Día Internacional del Trabajo, la iniciativa Iglesia por el Trabajo Decente (ITD) de Madrid, en colaboración con el Secretariado Diocesano de Pastoral del Trabajo, celebró el 1 de mayo una Eucaristía Jubilar en la Catedral de Santa María la Real de la Almudena. La misa, presidida por el obispo auxiliar de Madrid, monseñor Juan Antonio Martínez Camino, comenzó a las 10:00 horas y reunió a numerosas personas vinculadas a movimientos obreros, organizaciones eclesiales y entidades sociales de la diócesis. El equipo del Servicio diocesano de Empleo de Cáritas Diocesana de Madrid participó activamente.

El acto litúrgico se enmarcó en el camino hacia el Jubileo de la Esperanza 2025 y puso en el centro el lema de este año: “Trabajo decente, derecho, no privilegio”, un llamado a reconocer el empleo digno como un derecho esencial que sostiene la vida, la justicia y la dignidad de toda persona.

En su homilía, monseñor Martínez Camino recordó que “Dios actúa con su propio poder, no según los criterios de este mundo, sino en favor de quienes no tienen poder”. Subrayó que la esperanza cristiana no se basa en seguridades humanas, sino en la confianza en un Dios providente que acompaña los caminos de quienes luchan por una vida más justa. “Cuando vivimos sin temor, cuando compartimos la alegría de sabernos amados por Dios, construimos fraternidad y damos testimonio de esperanza”, afirmó.

Durante las peticiones, se elevó la voz de la comunidad por quienes sufren condiciones de trabajo precarias, por las personas sin empleo y por las víctimas de accidentes laborales. También se pidió por quienes ostentan responsabilidades políticas, para que sitúen como prioridad la construcción de un mundo más igualitario, fraterno y justo. Se rezó, además, para que España sea un país acogedor, solidario y generoso con quienes llegan en busca de una vida digna.

Lectura del Manifiesto de ITD 2025

Al finalizar la celebración, se dio lectura al manifiesto de la iniciativa Iglesia por el Trabajo Decente con motivo del Primero de Mayo 2025, centrado en la difícil realidad laboral de la juventud. El manifiesto transmitE que las personas jóvenes se enfrentan a exigencias desproporcionadas de formación y experiencia, a prejuicios sociales injustos y a condiciones laborales precarias que afectan gravemente a su salud emocional. Según datos del Observatorio de Emancipación, una persona joven debería destinar más del 100% de su salario para poder alquilar una vivienda sola, lo que evidencia la imposibilidad de una vida autónoma.

En este contexto, el trabajo decente aparece como un privilegio más que como un derecho, consolidando un modelo de precariedad que erosiona la esperanza. Frente a ello, el manifiesto reclama políticas públicas valientes, escucha activa por parte de la sociedad y el reconocimiento del empleo digno como motor de inclusión, justicia y futuro.

ITD recuerda las palabras del papa Francisco en Laudato si’: «El gran objetivo debería ser siempre permitir una vida digna a través del trabajo».

Y concluye con un mensaje que enlaza con el Jubileo de la Esperanza: “No se olviden: la esperanza no defrauda.

Con esta celebración, la Iglesia en Madrid renovó su compromiso con la defensa de un trabajo digno para todas las personas, especialmente para quienes más dificultades encuentran en su acceso. En palabras del papa Francisco, citadas en el manifiesto: «El gran objetivo debería ser siempre permitir una vida digna a través del trabajo» (Laudato si’, 128).

Volver