Una visita muy especial a la Catedral
Cáritas Madrid 6 de Septiembre de 2018El proyecto de mayores del Centro de Cáritas en el arciprestazgo de Usera de Vicaría V realizó una visita a la Catedral y a la capilla del Seminario
Cáritas Madrid. 6 de septiembre de 2018.- Beatriz, voluntaria en el proyecto de mayores del Centro de Cáritas en el arciprestazgo de Usera de Vicaría V, nos cuenta la visita que realizaron a la Catedral Nuestra Señora de la Almudena.
"Aunque hacia un día muy lluvioso, nuestros ánimos no decayeron y ahí estábamos todos puntuales a nuestra cita: visitar nuestra querida catedral! No una visita normal, no, íbamos a verla por dentro, su museo, la cúpula, la cripta y la sala capitular.
Hacia allí nos encaminamos. Nos esperaba una guía oficial que nos fue descubriendo y relatando la historia que tienen algunos de los objetos maravillosos que nos iba mostrando. Luego llegó el momento de subir a la cúpula y nos preguntó si estábamos dispuestas (llovía a cantaros, de ahí su pregunta) pero nosotras, muy animosas, dijimos que sí al unísono. Así que nada, subimos en el ascensor y al asomarnos ¡Madre mía¡ lo que caía, pero nosotras no dejamos que nuestro ánimo decayera. Salimos y dimos nuestra vuelta correspondiente con paraguas en mano ¡Qué vistas! ¡Qué maravilla! Nadie se arrepintió de haber subido.
Cuando nos despedimos de la guía agradeciéndole todo lo que nos había enseñado, dirigimos nuestros pasos hacia nuestra querida Almudena, esta Virgen de tez morena, como dice su himno, que tanto queremos todos, seamos madrileños o no. Recorrimos la girola y bajamos hacia la cripta. Allí nos acogió un silencio monacal “¡Qué bien se está!”, comentó una de nosotras y a la vista de tantas columnas, nuestra mente nos hizo rememorar tiempos ya pasados, como si hubiéramos retrocedido más de un siglo.
Como todavía quedaba tiempo y cogía de paso, nos acercamos al Seminario y contemplamos su capilla “¡Qué bonita!” fue una de tantas exclamaciones. Fin de la ruta cultural, pero todavía nos quedó un ratito para tomarnos un café y hablar de lo que habíamos visto. Estábamos todas encantadas y no hacíamos sino comentar todo lo visto. Y la pregunta general fue “¿Y la próxima salida, para cuándo?"