Una jornada para poner rostro y conocer la verdadera realidad que es

Cáritas Madrid 29 de Noviembre de 2019

Con motivo de la III Jornada Mundial de los Pobres, Cáritas Madrid ha celebrado diferentes encuentros con las personas que acompañamos y ayudamos en nuestros proyectos y servicios. Han sido unos encuentros que nos han ayudado a poner rostro, a conocer y a empatizar con la verdadera realidad que hay en nuestra Comunidad.

Con motivo de la III Jornada Mundial de los Pobres, Cáritas Madrid ha celebrado diferentes encuentros con las personas que acompañamos y ayudamos en nuestros proyectos y servicios. Han sido unos encuentros que nos han ayudado a poner rostro, a conocer y a empatizar con la verdadera realidad que hay en nuestra Comunidad.


Cáritas Madrid. 29 de noviembre de 2019.- En Cáritas Vicaría I celebramos la III Jornada Mundial de los Pobres, que este año versó sobre la cita a“La esperanza de los pobres nunca se frustrará (Sal 9, 19)” compartiendo un desayuno solidario. Fue un desayuno que compartimos como signo de encuentro, de compartir y de esperanza. Con personas y familias a las que atendemos, voluntarios, sacerdotes y personal estructural. Todos juntos en comunión, creando un espacio de encuentro, de conocimiento mutuo, de sensibilización y de concienciación sobre las situaciones de pobreza y de injusticia de hoy en día. Un desayuno muy especial, en los locales de la parroquia de Santa Rosalía, donde siempre nos acogen con los brazos abiertos. Porque de eso se trataba el encuentro. De calentarnos todos mutuamente saboreando una taza de chocolate, endulzado con una gran dosis de cariño.


La convocatoria fue un éxito al que acudieron unas cincuenta personas dispuestas a compartir un rato simplemente charlando y conociendo a otras personas que pertenecen a Cáritas. Sacerdotes, voluntarios, personal contratado y personas atendidas nos acercamos un poco más. Nuestro objetivo era acercarnos un poco más a las personas que atendemos en el día a día y pasar un rato en el que nos olvidamos de quien era la persona necesitada y quien era la voluntaria, todos fuimos iguales con la misma dignidad. 


Tras ver el video “Hay una realidad de ves y otra que es” del VIII Informe sobre Desarrollo y Exclusión social, que nos invita a cambiar nuestra mirada para ver la realidad tal como es, se organizaron grupos de trabajo para debatir. Las realidades que salen reflejadas en este pequeño video van desde el problema de la participación del individuo en los problemas de la sociedad, al análisis de la situación laboral o la problemática de la vivienda… Muestra #LaRealidadQueEs y no la que te cuentan o la que ves en la televisión.


No pudimos aportar ninguna fórmula mágica para dar esperanza quienes lo pasan mal, pero el encuenytro nos sirvió para compartir experiencias entre personas con vidas muy distintas.

Descubrimos entonces que la esperanza que estábamos buscando estaba allí: en la gente y en la unión ue se estaba creando entre nosotros. Conocimos a María que vive una situación muy difícil y acude al Taller de Labores de San Matías donde comparte unas horas a la semana con otras personas que tampoco tienen las cosas fáciles, como Amparo que nos cuenta que para ella lo mejor de los talleres es que ha hecho un grupo de amigas donde se siente respetada, querida y valorada.


También descubrimos al joven senegalés de diecinueve años que vive con el padre Jorge Dompablo. Lleva solo tres meses en España y a duras penas puede mantener una conversación, pero demostró cómo está  aprendiendo nuestro idioma y tiene la esperanza de poder encontrar un futuro entre nosotros.  Salió hace mucho tiempo de Senegal y tras cruzar medio continente africano llegó a Almería sin conocer a nadie. Fue a Burdeos donde tenía un contacto que no quiso apoyarle y volvió a Madrid donde tuvo la fortuna de cruzarse con el padre Jorge que le ha acogido en su parroquia.

Explicó que desde muy pequeño está solo en el mundo. No tiene padres ni hermanos y que por ellos se sentía feliz en España por la acogida y por poder vivir junto a otros chicos y el padre Jorge. ¡Esta es la realidad que es!

 



 

 

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