Un proyecto de ApS con el que hacer un 'camino de esperanza' junto a personas sin hogar
21 de Mayo de 2024A través de la Red FACIAM, de personas sin hogar, las personas que participan en el proyecto CEDIA 24 Horas han realizado una ruta por la naturaleza, por la Sierra de Guadarrama.
La ruta ha formado parte de un proyecto de Aprendizaje y Servicio en el que un grupo de jóvenes universitarios y profesores, de la Universidad Autónoma de Madrid, han propuesto una actividad de ocio saludable y conocimiento arqueológico y de la naturaleza junto a personas sin hogar.
La senda se llama el “camino del agua”, que tiene como recorrido 10 kilómetros, dónde se han encontrado con diferentes ecosistemas cómo por ejemplo pinar, robledal, etc. Han pasado por el Valle de la Fuenfría, dónde han visto el arroyo del Collado del Rey y una calzada romana.
Mientras se realizaba la ruta, las y los alumnos han explicado el patrimonio y además han hecho diversas actividades para conectar con la naturaleza y el cuidado del medioambiente, como por ejemplo recoger la basura o abrazar a un árbol.
Por otro lado, también se ha organizado una salida específica para mujeres con el título “Naturalmente activas”. En este caso se ha organizado una actividad en la naturaleza con baños de bosques en el Campus de la Universidad. Alumnado y profesorado les han impartido conocimientos de flora y fauna, para que viesen la importancia de cada árbol, de sus frutos, o para qué sirven.
También han encontrado huellas de animales de la zona y les han impartido nociones sobre la cultura de los lugares de origen.
Este ha sido, como nos dicen las propias mujeres de CEDIA, un momento para conocer y conocerse. “Un día de excursión, fue un momento de relajación, de integración con la naturaleza. Ejercitamos nuestros sentidos al máximo como el olfato, el oído, la vista y el tacto. Nos fuimos adentrando en el medio ambiente, dentro del recorrido tuvimos experiencias gratas, momentos de compartir opiniones y enseñanzas desde los conocimientos de cada una de nosotras y desde nuestras vivencias con la naturaleza”.
Desde el proyecto CEDIA agradecen esta propuesta que, por un lado, motivan a las personas sin hogar y las acercan al conocimiento del entorno y de ellas mismas; y por otro lado, es una manera de que las personas jóvenes se acerquen a programas sociales y contribuyan con sus conocimientos a la mejora de la sociedad. Se trata de recorrer ‘juntos un camino a la esperanza’.