Tomad, comed y bebed... y defended el trabajo digno

Presentación de la Campaña Contra el Paro en los Arciprestazgos de Santísima Trinidad y Espíritu Santo.

Cáritas Madrid. 6 de abril de 2016.- Somos lo que hacemos y nuestra identidad se manifiesta y visibiliza cuando concretamos en hechos concretos aquello que nos define y constituye. Hacer realidad el Reino de Dios, esto es, humanizando y dignificando la vida, nos lleva a los cristianos a defender los derechos sociales, en este caso, la defensa de un trabajo digno y estable para todos.

Desde esta actitud se presentó la campaña por parte de José Luis y Pepe, voluntarios del equipo de comunicación, a 39 voluntarios de ambos Arciprestazgos, en la parroquia Virgen del Coro. Comenzaba la presentación con un momento de silencio, que nos serenara e hiciera sedimentar nuestras preocupaciones y así acoger mejor lo que íbamos a compartir después. Tras el silencio transformador, escuchamos el Evangelio de la pesca milagrosa, que resonó en los congregados ayudado por estas preguntas:

¿Pescamos a veces de manera infructuosa? ¿Defendemos un trabajo digno y estable? ¿Cómo?¿Cuándo? ¿Es una utopía? Estos interrogantes y otros muchos resonaron ambientados ayudados por un bello canto del musical 33.

Nuestra Iglesia está preocupada y así lo manifiesta en sus escritos, por la dignidad en el trabajo: la política económica no es solo el capital. Debe fundarse en la justicia social. La Iglesia nos llama a los cristianos al compromiso transformador. La caridad no solo puede ser paliativa, debe ser preventiva y curativa. A pesar de lo que nos digan desde la mirada oficial e imperante, las cosas no son cerradas y sí hay otras formas de organizar la economía y sus decisiones acerca de la distribución de los recursos. Hace 100 años el fenómeno de la esclavitud se vivía con normalidad en nuestras ricas sociedades occidentales. Ahora, nos parecería un escándalo que existiera dicho fenómeno aberrante y alienante. Creyendo y construyendo la utopía del Reino de Dios en el mundo laboral, ese es el reto que tenemos y al que con énfasis la campaña nos invita y anima. Como afirma el papa Francisco, "que nadie nos robe la esperanza de creer y hacer otro mundo posible". ¿Es esto meterse en política? Es aflorar Evangelio. Si las personas se indignan, se movilizan, organizan y piden derechos sociales y dignidad para todo lo humano, no hay poder ni fuerza que destruya tanto caudal de fraternidad y misericordia.

¿Es posible la esperanza? Respuesta afirmativa ante por ejemplo, el testimonio de Mariana, mujer joven que nos compartió su proceso de paso de la desesperanza de quedarse sin empleo, a la esperanza de reconstruir su empleabilidad desde el taller 99 de Cáritas Madrid. Es posible también, desde el compromiso cotidiano de los voluntarios Pedro y Juan, de los dos Servicios de Orientación e Información para el Empleo de zona, que nos explicaron sus tareas en ambos servicios: ofrecer acompañamiento a las personas desempleadas a través de herramientas que posibilitan habilidades sociolaborales para aumentar posibilidades de encontrar empleo desde los itinerarios personalizados de empleo. También nos informaron que el mayor porcentaje de personas son mujeres y un aumento de personas mayores de 45 años demandantes de empleo. Manifestaron ambos además, el descenso de derivaciones desde las acogidas parroquiales.

Finalmente, José Luis nos concretó las propuestas de sensibilización que las dinámicas, comunicado parroquial, guión litúrgico, etc., nos facilita la campaña.

Abrimos un camino estos días, un camino de celebrar lo que somos, comiendo y bebiendo comunitariamente la vida y el estilo del Maestro, y así trabajar manifestando signos del Reino apostando por la defensa de la dignidad del empleo universal. Cada persona en su espacio, cada grupo en sus tareas, cada Comunidad en su barrio. No hay mayor amor que dar la vida por los amigos. Por eso, trabajando la campaña contra el paro, afirmamos: TOMAD, COMED, BEBED...Y DEFENDED EL TRABAJO DIGNO. Es el sueño de Dios para la Humanidad.