Somos caminantes sembradores de Esperanza

Cáritas Madrid 28 de Octubre de 2014

Con la alegría de la oración, la reflexión y el encuentro seguimos caminando repletos de energía y ganas para ser instrumentos de Dios y dedicarnos a los más desfavorecidos de nuestros hermanos.

Con la alegría de la oración, la reflexión y el encuentro seguimos caminando repletos de energía y ganas para ser instrumentos de Dios y dedicarnos a los más desfavorecidos de nuestros hermanos.


Cáritas Madrid. 28 de octubre de 2014.- Este es el título del Encuentro de Voluntariado de la Vicaría VIII.  Nos reunimos aproximadamente 100 personas, entre voluntarios, equipo técnico, sacerdotes… Nos acompañaron don Javier Cuevas, nuestro Vicario, don Luis Mª Cuellar, sacerdote coordinador de Cáritas, y don José Cobo, párroco de San Alfonso Mª Liborio, encargado de guiarnos en la reflexión.


Tras la oración en común, comenzamos la reflexión reavivando nuestro gozo por ser agentes de la pastoral de Cáritas, por sentirnos llamados y convocados para esta tarea como sembradores de Esperanza.

 

Como punto de partida, reparamos en  la tierra que abraza y nutre a los árboles que sembramos: la Palabra de Dios que revela el Amor Divino y la Iglesia llamada a vivir en una realidad cambiante. Contamos con la espiritualidad como savia que nutre nuestro árbol y lo hace crecer en altura pero también en profundidad. Las raíces de nuestro árbol son el Dios que se revela como defensor del pobre y que da a conocer su fuerza por medio de la debilidad de su hijo. Nuestro tronco es sólido, es la Iglesia como sacramento de quien ama y salva a la humanidad. Las ramas son abundantes y se alzan en todas direcciones optando por los últimos, devolviendo la dignidad a las personas, siendo voz de los que no son escuchados, haciendo de nuestras comunidades la casa de todos, superando el “nosotros” y “ellos”, dando protagonismo a los débiles. Los frutos y las nuevas semillas son abundantes y se nos plantean como retos.

 

Así, con la alegría de la oración, la reflexión y el encuentro seguimos caminando repletos de energía y ganas para ser instrumentos de Dios y dedicarnos a los más desfavorecidos de nuestros hermanos.

Volver