Se presenta el Informe FOESSA 2024 Madrid: una radiografía social imprescindible para nuestra Comunidad
Pilar Algarate 18 de Noviembre de 2025La Fundación FOESSA, en su 60º aniversario, en colaboración con Cáritas Española, ha publicado el Informe sobre exclusión y desarrollo social en la Comunidad de Madrid 2024. Este documento forma parte del IX Informe FOESSA sobre Exclusión y Desarrollo Social en España, un amplio estudio elaborado con la participación de 180 investigadoras e investigadores de 51 universidades, que analiza la evolución de la integración y la exclusión social en nuestro país y en cada territorio.
En la Comunidad de Madrid, el informe revela que el 19,6 % de la población —1,3 millones de personas— vive en exclusión social, lo que significa que una de cada cinco personas atraviesa dificultades que afectan a su vida cotidiana. La exclusión no se limita a los ingresos económicos: también incluye problemas de acceso a la vivienda, el empleo, la salud, la educación, la participación social y política o las redes de apoyo comunitario.
Aunque la exclusión se ha reducido 2,5 puntos respecto a 2021, la situación no ha recuperado los niveles previos a la pandemia. Desde 2018, hay 230.000 personas más en exclusión social, evidenciando que el crecimiento económico de la región no ha ido acompañado de una mejora semejante en la integración social.
La vivienda, epicentro de la desigualdad
El informe señala que la vivienda es hoy el principal factor de desigualdad en la Comunidad de Madrid. Afecta al 23 % de la población, empuja a 390.000 hogares por debajo de la pobreza severa una vez afrontan los gastos básicos y sitúa a más de un millón de personas en viviendas inseguras o inadecuadas. La falta de acceso, el alto coste de los alquileres, el hacinamiento y la precariedad residencial generan una tensión estructural que compromete la estabilidad y los proyectos vitales.
Más empleo, pero sin inclusión social
A pesar del crecimiento del empleo en la región —un 15 % más de personas ocupadas y una reducción del paro hasta el 9 %—, trabajar ya no garantiza la integración social. Los salarios estancados, la temporalidad y la parcialidad involuntaria explican que el 11 % de los hogares estén afectados por exclusión en el empleo.
Desigualdad en el acceso a la salud
La exclusión en la dimensión de salud ha mejorado respecto a 2021, pero persisten brechas importantes:
-
6 % de la población no puede acceder a una terapia psicológica.
-
1 de cada 5 personas no puede permitirse atención odontológica.
-
13 % tiene dificultades para costear medicinas o tratamientos.
Además, el porcentaje de personas que utilizan simultáneamente el sistema público y un seguro privado ha pasado del 2 % al 15 % desde 2018, reflejando una desigualdad creciente.
Infancia, personas migrantes y hogares monoparentales: los rostros más vulnerables
Tres grupos concentran los niveles más altos de exclusión:
-
Infancia: el 27 % de las personas menores de 18 años están en exclusión, una tasa que triplica la de las personas mayores de 65 años.
-
Hogares monoparentales: el 39,9 % de estos hogares —el 85 % encabezados por mujeres— está en exclusión.
-
Personas migrantes: presentan una tasa del 45 %, tres veces superior a la de la población española.
Un sistema de garantía de ingresos insuficiente
El Ingreso Mínimo Vital solo cubre al 42 % de las personas en pobreza severa. La Renta Mínima de Inserción ha pasado de 25.292 titulares en 2018 a 475 en 2024, una caída que deja sin apoyo económico a miles de hogares vulnerables.
Retos y llamada a la acción
Los datos muestran una sociedad donde persisten desigualdades profundas que dificultan el acceso a derechos y el desarrollo integral de muchas personas. No es un problema individual, sino estructural.
Cáritas Comunidad de Madrid subraya la necesidad de:
-
Abrir un diálogo social sobre el modelo de convivencia que estamos construyendo.
-
Proteger a la infancia y garantizar la igualdad de oportunidades.
-
Reforzar los servicios públicos, especialmente sanidad y educación, con atención especial a la salud mental.
-
Garantizar el derecho a la vivienda mediante políticas valientes y de largo recorrido.
-
Promover la integración de las personas migrantes como camino hacia una comunidad cohesionada.
-
Favorecer el acceso a un empleo digno, especialmente en cuidados y economía social.
El informe invita a pasar de un modelo centrado en el crecimiento económico y el consumo a otro basado en el bien común, los cuidados, la justicia social y ecológica.