“Queremos ser capaces de enredarnos en la vida de los demás, ofreciéndoles lo mejor de nosotros”

Cáritas Madrid 11 de Octubre de 2019

La familia de Cáritas Vicaria I celebró un encuentro este martes en la Parroquia de Nuestra Señora del Santísimo Sacramento con una Eucaristía presidida por el vicario Juan Carlos Vera.

 

La familia de Cáritas Vicaria I celebró un encuentro este martes en la Parroquia de Nuestra Señora del Santísimo Sacramento con una Eucaristía presidida por el vicario Juan Carlos Vera.


Cáritas Madrid. 11 de octubre de 2019.- “Te ofrezco todas las horas de este nuevo curso para que, sin miedos ni falsas excusas, sea capaz de enredarme en la vida de los de demás ofreciéndoles lo mejor de mí. Señor, sé Tú mi Roca, mi Fuerza, mi Consuelo y mi Apoyo”. Es la oración de las Misioneras Agustinas (*) con la que el director de Cáritas Vicaría I, Jaime Ortiz de Saracho, dio la bienvenida a las personas voluntarias, trabajadores y sacerdotes que acudieron el martes al encuentro del equipo de la Vicaría I.

El padre Juan Carlos Vera, vicario de Cáritas Vicaría I presidió la Eucaristía en la Parroquia de Nuestra Señora del Santísimo Sacramento junto a más de 150 personas de los diferentes arciprestazgos que forman el equipo que participaron en la ceremonia leyendo las moniciones, las lecturas, haciendo las peticiones, en el ofertorio y en la acción de gracias, todo ello amenizado por el coro de compañeros del Arciprestazgo de Buitrago.

Durante el ofertorio entregamos además del pan y el vino una camiseta y una pulsera de la marcha “Compartiendo viaje” que tuvimos hace unos días acompañando solidariamente a nuestros hermanos migrantes. También ofrecimos un cartel con los cuatro verbos que el papa Francisco nos ha llamado a practicar con las personas que encontramos en el camino: “acoger, proteger, promover e integrar”.

El papa Francisco en su Mensaje para la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado 2018 nos recordó que, “cada forastero que llama a nuestra puerta es una ocasión de encuentro con Jesucristo, que se identifica con el extranjero acogido o rechazado en cualquier época de la historia”.

Terminamos con unas palabras de nuestro sacerdote coordinador, Ramón Montero, que nos animó a seguir comprometiéndonos como cristianos con nuestros hermanos más desfavorecidos y a seguir construyendo el Reino de Dios.

 

 

 

(*) Oración tomada de la web de “Reflejos de Luz” de las Misioneras

 

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