Pablo Genovés: "Jesús nos invita a partir nuestra vida para repartirla con los demás, a compartir nuestro tiempo con los que más lo necesitan, a salir a su encuentro"

Más de 90 personas acuden al encuentro de Agentes de Pastoral Social de Cáritas Vicaría IV.

Cáritas Madrid. 15 de octubre de 2018.- Con el lema “TU COMPROMISO MEJORA EL MUNDO. No he venido a ser servido, sino a servir”, ha tenido lugar el 10 de octubre 2018, en el recién inaugurado CENTRO DE PASTORAL FAMILIAR “Hogar de la Misericordia” (antigua parroquia Nuestra Señora de la Piedad) el encuentro de comienzo de curso de todos los agentes de pastoral social de la Vicaría IV de Cáritas. Han asistido al mismo más de noventa personas.

 

El encuentro comenzó con unas palabras de bienvenida de Pedro de Luis, director de la Vicaría IV, que agradeció la presencia de todas las personas voluntarias e hizo una breve introducción del evento.

 

Seguidamente tomó la palabra Javier Ojeda, sacerdote coordinador de la Vicaría IV de Cáritas, quien, tras unas bonitas palabras sobre la Virgen María y sus ojos llenos de misericordia, rezó una oración de comienzo de curso con las personas presentes al acto.

 

Luego intervino el Vicario Juan Carlos Merino, que agradeció la labor de los voluntarios de Cáritas y habló brevemente de los principales retos a los que se enfrenta Cáritas en este nuevo curso, como la soledad de tantas personas, especialmente ancianos o el reto del paro juvenil. Dijo el Vicario que para aprender a ser discípulos misioneros teníamos que fijarnos en la Virgen María, que sabe ver las necesidades de los hombres, como vio en las bodas de Caná que hacía falta vino y así se lo hizo saber a su Hijo amado. Mirando a la Virgen como nuestra madre, nos reconoceremos como Iglesia. También dijo Juan Carlos que debíamos ser fieles al Cristo que sirve, que lava los pies a sus discípulos, animó a los presentes a lavar también, los pies a los hermanos. Finalmente subrayó la grandísima necesidad que existe hoy en día de la familia, a la que hay que apoyar y ayudar.

 

Tras sus palabras, el Vicario presentó al ponente Pablo Genovés como sacerdote diocesano, responsable del Centro de Pastoral Social de Santa María de Fontarrón, a quien lo más grande que le ha pasado es Jesús de Nazaret.

 

Pablo compartió con los presentes una profunda y preciosa reflexión sobre la Eucaristía y el voluntariado.

 

Empezó su charla hablando del fracaso como persona. Jesús, que dedicó toda su vida a hacer el bien y a sembrar amor, ternura, paz, despertó el odio de los dirigentes del pueblo y sabía que le iban a matar. Ante el fracaso, Jesús dice una misa, celebra la primera Eucaristía de la historia.

 

Resaltó principalmente tres cosas sobre esa Eucaristía: lo primero que hizo Jesús en la Eucaristía fue sentarse en corro con sus discípulos, al mismo nivel que todos para celebrar una cena en medio de la noche en la que poder compartir y unirse unos con otros.

 

En segundo lugar, el Señor se levantó del corro, se quitó el manto, cogió una toalla y se puso a lavar los pies a sus discípulos, a servir. ¿Cómo podemos hacer algo así en la Vicaría IV? Es difícil de saber, pero ese es el camino a seguir.

 

Lo tercero que hizo Jesús en la última cena fue partir el pan y cuando ya estaba partido dijo “Esto es mi cuerpo”, queriendo enseñarnos que sólo valía para ser repartido, para llegar a todos. Jesús nos invita a partir nuestra vida, para repartirla con los demás, a compartir nuestro tiempo con los que más lo necesitan, a salir a su encuentro.

 

Tras la reflexión, los asistentes rezaron una breve y bonita oración de Pedro Casaldáliga, llamada Mi cuerpo es comida

 

Mis manos, esas manos y Tus manos

hacemos este Gesto, compartida

la mesa y el destino, como hermanos.

Las vidas en Tu muerte y en Tu vida.

 

Unidos en el pan los muchos granos,

iremos aprendiendo a ser la unida

Ciudad de Dios, Ciudad de los humanos.

Comiéndote sabremos ser comida.

 

El vino de sus venas nos provoca.

El pan que ellos no tienen nos convoca

a ser Contigo el pan de cada día.

 

Llamados por la luz de Tu memoria,

marchamos hacia el Reino haciendo Historia,

fraterna y subversiva Eucaristía.

 

Tras la cual hubo un diálogo y un turno de preguntas. Muchos asistentes se animaron a compartir lo que les había parecido la ponencia y a hacer preguntas y reflexiones en voz alta.

 

Cerró el acto el director de la Vicaría IV, Pedro de Luis, que pidió un fuerte aplauso para Pablo Genovés, a quien agradeció su exposición, que ayudó a los presentes a conmoverse y a plantearse muchas cosas.