Más de 150 personas acuden al Encuentro de Voluntariado en Cáritas Vicaría VIII

Cáritas Madrid 16 de Junio de 2016

Somos Iglesia que acompaña, Iglesia que ama, Iglesia que cura, Iglesia que perdona, Iglesia que sale a los caminos, Iglesia que anuncia la Buena Noticia, Iglesia que sale en comunión, Iglesia que es madre, Iglesia que sorprende siempre, Iglesia que sabe Quién la sostiene. Así nos sentimos, es lo que somos como Iglesia y como parte de Cáritas en respuesta a nuestra vocación.

Somos Iglesia que acompaña, Iglesia que ama, Iglesia que cura, Iglesia que perdona, Iglesia que sale a los caminos, Iglesia que anuncia la Buena Noticia, Iglesia que sale en comunión, Iglesia que es madre, Iglesia que sorprende siempre, Iglesia que sabe Quién la sostiene. Así nos sentimos, es lo que somos como Iglesia y como parte de Cáritas en respuesta a nuestra vocación.

 

Cáritas Madrid. 16 de junio de 2016.- El 13 de junio por la tarde, en la parroquia de la Beata Mª Ana Mogas de la Vicaría VIII, nos encontramos más de 150 voluntarios y 13 sacerdotes que hacemos viva nuestra fe día a día junto a muchas personas que confían y se apoyan  en la Iglesia para salir adelante de situaciones complicadas.


Nuestro vicario, don Ángel Camino, nos acercó las palabras que el arzobispo don Carlos Osoro nos brindó hace pocos días en su Carta Semanal y en la que nos  invita  a contemplar a la Iglesia en diez dimensiones que nos hacen  descubrirla  como la  gran compañera del camino de la vida.


Somos Iglesia que acompaña, Iglesia que ama, Iglesia que cura, Iglesia que perdona, Iglesia que sale a los caminos, Iglesia que anuncia la Buena Noticia, Iglesia que sale en comunión, Iglesia que es madre, Iglesia que sorprende siempre, Iglesia que sabe Quién la sostiene. Así nos sentimos, es lo que somos como Iglesia y como parte de Cáritas en respuesta a nuestra vocación.


Las palabras que con tanta energía y tanto ánimo nos dirigió nuestro Vicario nos prepararon para la Eucaristía de acción de gracias que celebramos con posterioridad a la charla. Todos y cada uno de los arciprestazgos participaron en hacer de esta Eucaristía una mesa común.


Éste ha sido el último encuentro del curso, ya que a partir de ahora, con la llegada del verano, nos iremos dando el relevo unos a otros para poder descansar sin dejar de estar atentos a los hermanos que nos piden una mano para seguir hacia adelante.

 

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