Espiritualidad de la ternura en el voluntariado

Cáritas Madrid 3 de Julio de 2017

Encuentro de Voluntariado del arciprestazgo Espíritu Santo de Cáritas Vicaría II

Encuentro de Voluntariado del arciprestazgo Espíritu Santo de Cáritas Vicaría II.


Cáritas Madrid. 3 de julio de 2017.- Solemos entregarnos a nuestra tarea social, en cuerpo ¿y en alma? Vivimos experiencias de todo tipo y no siempre encontramos espacios para expresar cómo nos sentimos, manifestar la necesidad de que se comprendan nuestras ansiedades y anhelos, cuidar nuestras motivaciones. A Jesús le pasó lo mismo, muchas tareas durante el día y sentía cargadas sus espaldas, y buscó momentos de sosiego y paz para dar sentido a todo lo que vivía. Este conocimiento profundo de lo que somos y de la realidad, lo llamamos espiritualidad, y es ternura porque al encontrarnos con el otro y nos dejamos afectar por su realidad, eso nos conmueve y nos empuja a estar ahí, porque también en ello nos va nuestra propia significancia de la vida. Hay una ternura que se expresa y otra que se vive. La ternura brota en momentos duros, nos sale el abrazo al conocido o al desconocido. La relación de Jesús con la persona es una relación de ternura. Jesús no etiqueta a nadie. Vivir la espiritualidad de la ternura es acercarnos al otro sin avasallarle ni humillarle con paternalismo insoportable. El Evangelio nos muestra constantes retazos de ternura de Jesús con la gente. Y da autonomía y hace que la persona despliegue sus capacidades: "Vete, tu fe te ha salvado" porque la persona es mucho más que su problemática. La ternura también es respuesta a las agresividades que vivimos.

 

Así se refrescaron por dentro, un grupo de 16 voluntarios del Arciprestazgo Espíritu Santo, en la parroquia de Santos Felipe y Santiago, animados por Teresa Comba, teóloga y psicóloga, del equipo de Pastoral Social de Vicaría II. Teresa nos propuso estas pinceladas refrescantes para beber y expresar esa ternura que todos llevamos en nuestro corazón, y nos propuso además unas pistas concretas para trabajarlas en lo personal y en el grupo de Cáritas:


Propuestas prácticas

- Aprender a leer en los demás la ternura que necesitan, sin invadir sus espacios, incluso preguntando, ¿te puedo dar un abrazo?¿Te puedo invitar a un café?

- Acoger la ternura. Es más exigente el amor recibido que el amor dado, porque descubre nuestra fragilidad, nuestras pobrezas. La ternura es el comienzo de la sanación.

- Releer nuestras experiencias desde el Evangelio. Aprender de las experiencias de Jesús, cómo las voy identificando en mi vida, desde mis resistencias, mis miedos.

- Dedicarnos esos tiempos que parece que no tenemos, a orar, estar en silencio, a escucharnos qué nos ocurre y por qué.

- Espacios para descansar, disfrutar, estar con los amigos.

 

¿Tenemos estos tiempos en nuestros grupos de Cáritas.., o solo nos juntamos para hablar de casos y ayudas?

 

Terminamos con las palabras refrescantes de Eduardo Galeano que Teresa nos regaló como broche al final del Encuentro:

 

 

 

        "Tenemos la alegría de nuestras alegrías

 

         y también tenemos la alegría de nuestros dolores.

 

         Porque no nos interesa la vida indolora

 

         que la civilización del consumo nos vende

 

         en los supermercados

 

 

 

         Nosotros, tenemos la alegría de nuestros errores

 

         tropezones que muestran la pasión

 

         de andar y el amor al camino,

 

         tenemos la alegría de nuestras derrotas

 

         porque las luchas por la justicia y la belleza

 

         valen la pena también cuando se pierde

 

         y sobretodo tenemos la alegría de nuestras esperanzas

 

         en plena moda del desencanto,

 

        cuando el desencanto se ha convertido

 

         en artículo de consumo masivo y universal..

 

 

 

        Nosotros, seguimos creyendo

 

        en los asombrosos poderes del abrazo humano". Eduardo Galeano.

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