"En esta Navidad, celebramos la Vida de Cristo que transforma nuestras vidas y se convierte en Buena Noticia salvadora para la humanidad"
Cáritas Madrid 24 de Diciembre de 2018Cáritas Madrid. 24 de diciembre de 2018.-"Todo es gracia". Con estas palabras concluye el escritor francés Georges Bernanos su novela Diario de un cura rural. La Navidad es un tiempo especial que en el que podemos sentirnos "agraciados". A pesar de los oscuros nubarrones que se ciernen sobre la humanidad, aunque el mal y la injusticia parecen campar a sus anchas, en el Misterio de la Encarnación ¡nos ha visitado la gracia entrañable que viene de lo alto! Dios en Jesús, ha asumido nuestra condición humana y, en solidaridad con ella, transforma y salva nuestra vida y hace mejor y más habitable el mundo.
Es verdad, hay “Vidas que cambian otras vidas”. Con la mano extendida, ofrecemos esa Vida que ha irrumpido en la historia y que se torna Buena Noticia para la humanidad doliente. Este derroche de amor es posible, a su vez, gracias a otras vidas que generosa y colaborativamente han ayudado al milagro. Todo es expresión de la pura lógica del don. Representa el triunfo de la gratuidad. En definitiva, no todo se compra o se vende, tampoco todo se conquista. Hay cosas que simplemente se ofrecen, se acogen y se aceptan con humildad. No somos mercaderes, sino traficantes de sueños.
En este año Mariano, discípulos misioneros como Ella, recordamos que es la «llena de gracia» (Lc 1, 28), la totalmente agraciada. María se abandona y, practicando la hospitalidad, acoge la Vida en su seno y se deja cambiar. Como señala con agudeza el Papa Francisco, no dijo: «Yo haré según tu palabra». No. Más bien: «Hágase en mí según tu Palabra». Y Dios se hizo carne en su seno. María es receptiva, pero no pasiva. Ha concebido primero la fe en su corazón, y después al Señor. Desde ahí, presta la vida para que Dios realice sus obras y está atenta a las necesidades de la humanidad.
En esta Navidad, celebramos la Vida de Cristo que transforma nuestras vidas y se convierte en Buena Noticia salvadora para la humanidad. Nuestra propia existencia es su prolongación amorosa y una poderosa llamada a procurar que “todos tengan vida”. No en último lugar, la vida de los pobres cambia la nuestra y nos hace dichosos, felices, bienaventurados y agraciados. Los pobres son fuente de gracia, escuela de humanidad y forja de fraternidad universal. La amistad y la solidaridad con ellos, además de sacar lo mejor de nosotros mismos, nos devuelven el ciento por uno en esta vida y alientan nuestro anhelo de justicia. Cambian nuestra vida.
Un año más, la campaña de Navidad de Cáritas Madrid nos invita a disfrutar del derroche de amor de Dios. Algo ha visto el Buen Dios en la frágil condición humana para merecerle tanto la pena. Por eso la asume con gusto y con pasión y nos anima a cambiar la vida de los demás haciendo más gozosa, justa y vivible su existencia.
El lema general de Cáritas reza: “Tu compromiso mejora el mundo”. Y cambia también, radicalmente, nuestro vivir cuando se asienta en la Vida que nos visita esta Navidad.
Desde Cáritas Madrid, ¡Feliz Nacimiento del Señor a todos los hombres y mujeres de buena voluntad! E incluso a los de mala. Que Dios nos quiere con locura no por ser buenos, sino para que lo seamos.
José Luis Segovia Bernabé
Vicario Episcopal