EL VOLUNTARIADO ES “EL MILAGRO DE LA CARIDAD”

“Hemos comenzamos el curso cargado de retos y también cargado de ilusiones y esperanzas para trasmitir a tantas personas que necesitan de nuestro apoyo”. Este es el propósito de las familias que colaboran en Cáritas Vicaría VIII, que se han reunido en un espacio de reflexión, en la Parroquia San Francisco Javier. En total han participado 120 voluntarios y voluntarias.

El espacio ha servido para reflexionar sobre el compromiso y la entrega en las obras sociales de Cáritas Madrid de estas familias voluntarias. Y además les “ha inspirado y animado a trabajar con ganas y fuerzas”.

Ángel Camino Lamelas, Vicario Episcopal de Cáritas Vicaría VIII, ha presidido la eucaristía que se ha dado durante el encuentro, agradeciendo tanto a las personas voluntarias, como a Pablo, sacerdote coordinador, y al equipo de la Vicaría VIII “su buen quehacer cotidiano”.

El Vicario también ha invitado a vivir en “sinodalidad”, como nos propone el papa Francisco: a través del conocimiento del otro, acercándonos a su historia, saliendo a su encuentro; a través de la escucha, activa y sin prisas, de la escucha que es acogida en Cáritas Madrid; y a través del discernir para descubrir, en un mundo de desafíos, al Espíritu Santo.

Esta sinodalidad, este unirnos a los demás, es el espíritu que representan las personas voluntarias que son la base de Cáritas Diocesana de Madrid. Son quienes junto a las familias más vulnerables conocen, escuchan y disciernen, y así cumplen con su misión evangelizadora.

Por su parte, José Luis Segovia, Vicario Episcopal de Desarrollo Integral e Innovación, también presente en el encuentro, les ha dado las gracias y ha destacado que la labor del voluntariado es “el milagro de la Caridad”. En este tiempo de pandemia han sido las personas voluntarias, cada vez más jóvenes, quienes se han convertido en el “alma de la sociedad”, han respondido al sufrimiento desde la solidaridad y juntos como Iglesia, juntos sacerdotes, arciprestazgos, religiosos y laicos. Se ha dado a las necesidades de las familias más vulnerables respuestas creativas y sencillas.

En este sentido, ha recordado el emotivo mensaje del Papa a las personas de Cáritas: “Queridos poetas sociales, que tenéis el coraje de crear esperanza en el descarte e indiferencia y forjar el cuidado en comunidad. Tenéis dedicación al anuncio de esperanza. Lo sabéis anunciar con vuestra vida. Sois gotitas de esperanza que facilitan la fe. Dios es la garantía de esperanza, y seguís apostando por los desvalidos a pesar de las dificultades”.

Asimismo, también ha reflexionado sobre “¿Qué hemos de hacer? ¿Qué pide el Señor a la Iglesia?”. Y la respuesta es también sencilla: “respetar la diversidad, respetando la singularidad, y actuar desde la caridad de la comunidad cristiana y la sinodalidad”. Se trata, en definitiva, de dar servicio al territorio para asegurar la atención a todas las personas, y hacerlo con “la mirada de los voluntarios de Cáritas, que es compasiva y anhela justicia social y vela por los derechos y dignidad de las personas”.