El Economato Solidario acoge a 60 usuarios al mes

Entrevistamos a D. Jorge González Guadalix, PArroco de la Pª Beata María Ana Mogas, en Tres Olivos, Fuencarral.

 

El pasado 2 de diciembre del pasado año, D. Fidel Herráez, Obispo Auxiliar de Madrid, bendecía e inauguraba el primer Economato Solidario de Cáritas Madrid, acogido en la Parroquia Beata María Ana Mogas (Tres Olivos) perteneciente la Arciprestazgo de Fuencarral, Cáritas Vicaría VIII.

 

D. Jorge González Guadalix, Párroco de  Beata María Ana Mogas,  debe tener a estas alturas una buena perspectiva de esta realidad, tras casi mes y medio de rodaje. Por eso le hemos pedido que nos cuente su experiencia y puntos de vista:

 

 

P:  ¿Qué productos pueden adquirir los usuarios y a qué precio?

 

R: Se trata, digamos, de un pequeño supermercado de barrio con productos básicos de alimentación, aseo personal y limpieza. Dentro de los alimentos también se facilitan congelados y lácteos. El precio de los productos lo hemos fijado en un 20% de los equivalentes que se encuentran el mercado ordinario.

 

P: ¿Puede Vd. contarnos algo más sobre cómo funciona el economato para sus usuarios? ¿Cuáles   son las reglas?

 

R: Los usuarios son familias que son derivadas hacia nosotros por los centros de acogida de Cáritas de varias Parroquias de nuestro Arciprestazgo. Han sido elegidas muy cuidadosamente en base al nivel de sus necesidades y circunstancias sociales.
A cada familia usuaria se la ha entregado un carnet para que pueda acudir al economato y por nuestra parte  llevar un control de lo que va adquiriendo. Pueden acudir dos veces al mes en los días y horas que se les señala, y pueden gastar un máximo de diez euros por persona y mes, lo que equivaldría a cincuenta euros en un comercio normal.

 

P: ¿Qué aporta el Economato  sobre el servicio de entrega gratuita de  alimentos de Cáritas Parroquial, que tan bien funcionaba y que ha hecho posible entregar  20.000 kilos en productos el pasado año a un buen número de familias necesitadas en esta Parroquia?

 

R: Con este nuevo sistema logramos algo esencial: la dignificación de los usuarios. No acuden a un centro “a recibir lo que quieran darme”, sino a ser yo “el sujeto de mi compra” Eligen lo que quieren, lo pagan de su bolsillo, se sienten, digamos, personas como las demás. Para el voluntariado que los atiende supone  un cambio grande. De alguna manera tienen que “bajar de su pedestal”, ya no regalan sino sirven. De una postura de “yo decido lo que quiero darte” a otra bien distinta de “te entrego lo que tú me pides”.

 

P:  Magnífico lo de pagar una cifra casi simbólica por los alimentos y haber ganado en dignidad.  Pero hay familias que no tienen nada de nada y hasta pocas semanas venían aquí a por alimentos gratuitos. ¿Qué han hecho Vds. con estas personas?

 

R: Tengo que decir que, sin sorpresa alguna por nuestra parte,  la totalidad de las familias que recibían alimentos gratuitamente y que eran también derivadas de varias parroquias del Arciprestazgo, son parte hoy de las familias usuarias del Economato, y han mostrado una gran motivación y satisfacción en el cambio.

 

P: ¿Quién le ha ayudado a esto? ¿De dónde ha sacado Vd. la idea, el dinero, tiempo y mano de obra para llevarlo a cabo?

 

R: Todo tiene su inicio en una entidad financiera francesa que opera en España, NATIXIS, la cual se ofreció a Cáritas Madrid para apadrinar alguna obra social; Cáritas Madrid apoyó el proyecto desde el primer momento encaminando el mismo hacia la Vicaría VIII y en particular a esta Parroquia. La ilusión era muy grande por tratarse del primer economato de estas características que entraría en funcionamiento en la Diócesis de Madrid. NATIXIS aportó una generosa cantidad inicial, decisiva, para la puesta en marcha del proyecto.
Respecto de donde sacamos el tiempo, no lo sabemos muy bien, pero lo sacamos. Cuando se trata de hacer algo por los demás siempre hay tiempo. Y sobre la mano de obra pues aquí tenemos un grupo entusiastas de voluntarios (los que antes atendían el servicio de alimentos y otros más) que generosamente dejan parte de su vida por esta causa.

 

P:  ¿Y el día a día que le espera? De nuevo le pregunto, ¿de dónde sacará los alimentos y otros recursos para garantizar la “sostenibilidad “del economato?.

 

R: El Señor es nuestro principal apoyo y valedor. En Él siempre confiamos. ¿De dónde sacamos los productos, como pagamos los gastos de mantenimiento, etc.?. Lo hacemos gracias a varias fuentes. Entre ellas las “operaciones kilo”, las mismas que veníamos haciendo hasta ahora y que siempre han dado magníficos resultados por la generosidad de los donantes. Y luego tenemos aportaciones de benefactores varios. Como la propia NATIXIS ( la empresa como tal y sus empleados a título personal) que nos entregan una significativa cantidad mensual. Pero tengo que dejar claro que vamos a necesitar el apoyo de muchos para que el Economato siga siendo una realidad  ¡Que no nos olviden!

 

P:   ¿Cómo ve Vd. el futuro de este proyecto, que es ya una realidad?

 

R: Tengo que decir que la experiencia que hemos tenido desde su inauguración hace ahora poca más de un mes es altamente gratificante. Todo está rodando como se esperaba, usuarios y voluntarios encantados. Habíamos empezado con cincuenta familias y lo acabamos de ampliar a sesenta bastante antes de lo previsto. A medio plazo nuestro objetivo es poder dar servicio a cien familias, que es el máximo que en las condiciones actuales podríamos atender.

 

Luis de Cárdenas Cobián
Comunicación para la Sensibilización
Cáritas Madrid, Vicaria VIII