Día de Caridad: "no nos tienen que dar las gracias, somos voluntarios y es nuestra obligación ofrecernos a los demás"

Cáritas Madrid 2 de Junio de 2016

"Es un día en el que parece que todos somos uno y todos perseguimos el objetivo de un mundo mejor, más justo y sin desigualdades."

"Es un día en el que parece que todos somos uno y todos perseguimos el objetivo de un mundo mejor, más justo y sin desigualdades."


Cáritas Madrid. 2 de junio de 2016.-Todavía nos dura la emoción que vivimos en la jornada, para nosotros, más importante del año: el Día de la Caridad. Una oportunidad para que miles de personas reciban información de lo que hacemos y puedan sumarse a nuestra labor de acoger y acompañar a quienes más lo necesitan.


Cerca de 5.000 voluntarios ocuparon 551 mesas distribuidas por toda la dióceis de Madrid informando de todas las acogidas, proyectos, centros y servicios que ofrece Cáritas Madrid. Pero, sobre todo, sensibilizando y haciendo hincapié en la necesidad de colaboración de todos y para todos. Así, miles de personas comprometidas pasaron la mañana recaudando donativos de los madrileños para todos estos proyectos. “Cuando se acercan a aportar algo de dinero, son muchos los que nos dan las gracias por la labor que hacemos, pero nosotros les decimos que no tienen nada que agradecernos, que somos voluntarios y es nuestra obligación ofrecernos a los demás”, contaba una voluntaria frente a su mesa de cuestación. “Es un día que vivimos con muchísima emoción porque lleva mucho trabajo, queremos que salga perfecto y, sobre todo, que sirva para que la sociedad se conciencie de la necesidad de compartir con los que menos tienen”, añadía otra.

El lema de la campaña, “Vive la misericordia. Deja tu huella”, relucía más que nunca en los carteles que se colocaron junto a las mesas. “Qué maravilla de cartel tenemos este año, ¡es que es precioso!”, exclamaba orgullosa otra de las voluntarias admirando su mesa. “¿Y qué me decís de cómo nos han dejado las mesas? ¿Habéis visto qué colorido más bonito?”, añadía. Alberto y Diego fueron dos de las personas acogidas en el centro personas sin hogar de Cáritas Madrid, CEDIA, que se encargaron de realizar las composiciones de flores que adornaban las mesas de cuestación de Cáritas Vicaría VI. “Ha sido una oportunidad que agradecemos mucho porque, además de aprender muchísimas cosas sobre las plantas y flores, nos ha permitido sentirnos útiles y ofrecer algo de nosotros a una entidad que nos ha dado tanto”, contaba Diego. “Yo me he encargado de distribuirlas y lo que más me ha llenado ha sido la alegría y el entusiasmo con el que me recibían todos los que las recibían. Me hacía sentir especial”, decía Alberto.


“Pasamos un día estupendo porque, aunque es algo cansado y algunos estamos un poco

mayores -ríe- vemos que da sus frutos”, explicaba otra de las voluntarias. “Intentamos que las personas se sientan a gusto cuando nos acercamos a hablar con ellos, porque la cercanía hace que uno se comprometa más, es lo más importante”. “Estoy encantado de estar realizando la cuestación un año más. Hace 2 años que lo hago y creo que seguiré repitiendo muchos más porque es una experiencia increíble”, apuntaba un voluntario. “El contacto con tanta gente, poder contar lo que hacemos, y ver que muchos de ellos se interesan por nuestros proyectos, por hacerse donantes, por pedirnos consejos... Es un día en el que parece que todos somos uno y todos perseguimos el objetivo de un mundo mejor, más justo y sin desigualdades”.


Por todo esto, el buen sabor de boca y la satisfacción se repite un año más. Los voluntarios se mostraban encantados de ver como los madrileño les escuchaban, les daban las gracias... “Días como hoy me hacen volver a confiar en el ser humano”, decía riendo otro de los voluntarios. “La respuesta de los ciudadanos es lo más importante porque tenemos mucho en cuenta que no solo es recoger, sino motivar. Conseguir animarles a que colaboren con nosotros, se sientan parte de esta gran familia y vean que dando un poquito de sí mismos reciben mucho más de los demás.

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