Dando forma a la alegría

A través de la papiroflexia, los niños y niñas del proyecto de menores del Centro Residencial JMJ, trabajan la concentración y la atención, además de divertirse.

Cáritas Madrid. 17 de febrero de 2015.- La primera excursión del Centro Educacional de Menores del Centro Residencial JMJ de Cáritas Madrid consistió en un taller y una exposición de arte con papel, más conocido como papiroflexia. Voluntarios, monitores y educadores prevén próximas visitas para el disfrute de los chicos.

Un doblez a la derecha y otro hacia la izquierda. Con un par de vueltas más, el papel de colorines que llegó a manos de una niña se había transformado en una caja y ¡qué bonita le había quedado!

¿Cuál sería la siguiente forma?

Un vaso, luego un plato y ¡hasta un tenedor!… entre ojos expectantes y sonrisas, las manos hábiles de la pequeña generaron figuritas de papel: una de ellas fue a dar a las manos de su educadora, otra a la de algún voluntario, con esa dulzura de los chicos que cautiva a quienes trabajan en Cáritas Madrid con proyectos dirigidos a niños, como es el caso del Centro Educacional del Menor (CEM).

Junto a la pequeña, otros 21 niños acudieron a la Exposición de Escultura, Papiroflexia y Arte en Papel organizada por el Ayuntamiento de Madrid en el Centro Cultural Pilar Miró, en Villa de Vallecas. Aquí, los chicos protagonizaron un taller de papiroflexia para luego conocer las distintas maneras de crear con papel a través de la exposición dispuesta en el sitio, donde lograron compartir y pasar una tarde participando de las dinámicas con ilusión.

Desde la vocación de ayuda de Cáritas Madrid, en el CEM se establecen cuatro áreas de apoyo a niños con edades entre 6 y 16 años: apoyo escolar, habilidades sociales, hábitos saludables y ocio para potenciar su formación en valores. Así, dentro del Centro, se destinan espacios para el refuerzo educativo, merendar e involucrarse en talleres de manualidades, sin embargo, esta vez la diversión esperó a los pequeños en el Centro Pilar Miró.

“A los niños les gustó y tratamos de mezclar las edades para que se ayudaran entre ellos”, indica una de las monitoras que acompañó al grupo.

Sonrientes y emocionados, los chicos recorrieron la exposición, lo que motiva a los responsables a programar nuevas visitas. Esta fue la primera excursión del CEM, pero seguramente no será la última puesto que el grupo de voluntarios, monitores y educadores que trabaja en el Proyecto tiene previsto, por lo menos, una actividad trimestral para brindar a los pequeños la posibilidad de participar en eventos enriquecedores que estimulen su desarrollo creativo, y que apoyen al refuerzo educativo.

Este proyecto se realiza en colaboración con el Programa Caixa Proinfancia de Obra Social “La Caixa”.