‘CONSTRUCTORES’ DEL REINO: EL EQUIPO DE EMPLEO DE CÁRITAS MADRID

El Reino de Dios ya está aquí. Tal y cómo nos enseña el evangelio de Lucas, ha llegado sin estruendo y “está en medio de vosotros” (Lc 17, 20). Hay exégetas que dicen que este texto es una llamada a participar en su construcción.

Efectivamente, el Reino de Dios está entre nosotros en potencia, pero necesita de nuestra participación para que sea una realidad plena. Estamos llamados a poner ladrillos en sus muros y sus paredes, hacer que crezca y que sea una realidad fraterna para todos los seres humanos. 

¿Cómo podemos hacerlo? ¿Cómo podemos participar los cristianos en su venida? De mil maneras, pero una es formar parte de Cáritas, siendo personas voluntarias o contratadas. Formando los equipos de las vicarías, las obras y los servicios de Cáritas Madrid, por ejemplo. 

Constructores del Reino son las personas que integran el Servicio Diocesano de Empleo (SDE), que han compartido un espacio de encuentro. El encuentro se ha centrado en la realidad del empleo (y desempleo) juvenil. Hemos contado con la participación de Imanol Morales, tesorero de un  movimiento  juvenil de la Acción Católica, la Juventud Obrera Cristiana. Ha presentado, basándose en testimonios de jóvenes acompañados por su movimiento, la realidad que viven muchos de las chicas y los chicos menores de 26 años en nuestro país. Y lo hizo de una manera sencilla: con una herramienta sencilla para gente sencilla.

Importarte recoger el recordatorio que nos ha hecho Imanol sobre el desempleo, la precariedad y otros problemas laborales sufridos por los jóvenes: no son realidades naturales, son injustas y se pueden remediar. Con la participación de Imanol, en nombre de su movimiento, abrimos una ventana en el SDE al encuentro con otros movimientos, congregaciones… vinculadas a la evangelización del mundo del trabajo. 

Tras el diagnóstico de Imanol, hemos sabido de una respuesta de Cáritas Madrid a esta problemática. De la mano de Fernando Arias, su responsable, se ha presentado el Campus Cáritas, un centro que albergará varios recursos de Cáritas, teniendo la intervención con jóvenes un lugar central. Partiendo del ocio y el tiempo libre, se tratará de dar una segunda oportunidad educativa a chicos y chicas que han abandonado prematuramente el sistema educativo, así como de acercarles a la formación y al empleo que les permitan la inserción laboral y, por ende, a una vida plena y autónoma.

El acto ha terminado con un pequeño gesto, en el que cada persona voluntaria o contratada ponía su ladrillo en la construcción del Reino (conocimientos, servicio, hermandad, paciencia, experiencia…). —Aunque a decir verdad, terminar, terminar, terminamos disfrutando de unos sabrosos aperitivos elaborados por Carifood, nuestra empresa de inserción dedicada al catering—.