El arzobispo José Cobo: 'Que la felicitación de Dios ilumine especialmente todas las realidades sufrientes', en su mensaje navideño
Pilar Algarate 24 de Diciembre de 2024En su mensaje navideño, el cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid, expresa su deseo de paz y esperanza para todos los madrileños, destacando la importancia de la Navidad como un tiempo para renovar la fe y la esperanza en medio de las dificultades del mundo. "Alegraos, porque Cristo nace, siempre viene", afirma el cardenal, invitando a todos a acoger de manera renovada el nacimiento de Jesús.
El cardenal subraya que la Navidad es una oportunidad para reflexionar sobre el don divino de la encarnación de Dios, quien se hace uno de nosotros. Este año, la Navidad se enmarca en un periodo jubilar, en el que se celebra de manera especial la reconciliación, la peregrinación y la esperanza. "Cristo nace en medio de este mundo. Es la voz de la Navidad", destaca, subrayando que este mensaje llega especialmente a aquellos que sufren en hospitales, cárceles, en la calle o atraviesan crisis personales.
José Cobo también hace un llamado a renovar la fe y la esperanza en un mundo marcado por el pesimismo, la violencia y los conflictos. "Necesitamos volver a creer, volver a renovar la fe, la esperanza, la alegría y el amor", dice, invitando a todos a dejarse iluminar por la Navidad de Cristo, que nos llama a la reconciliación y a sanar las heridas del mundo.
En su mensaje, el Cardenal dedica un especial deseo para las personas que atraviesan situaciones de sufrimiento, ya sea en hospitales, cárceles, la calle o enfrentando crisis personales, económicas, emocionales o soledad. "Que la felicitación de Dios ilumine especialmente todas las realidades sufrientes que abrazamos diariamente en la Iglesia", expresa, asegurando que, en medio de la oscuridad, el mensaje de la Navidad llega para recordar que "no temáis, Cristo ha nacido estos días".
El cardenal también recuerda la fuerza reparadora del amor, la ternura y la solidaridad que pueden transformar el dolor en belleza, citando las recientes tragedias en los pueblos de Valencia como un ejemplo de cómo el amor puede brillar incluso en medio de la adversidad. "Alegraos, que Cristo nace para que le acojamos y, junto a él, ayudemos a todos a descubrir la alegría y la dignidad humana", concluye.
Finalmente, nuestro Arzobispo nos desea a todos una Feliz Navidad, invitándoos a acoger la Navidad con fe renovada y a caminar juntos como peregrinos de esperanza hacia el Año Jubilar que está por comenzar.