Reforzamos nuestros lazos de familia y de amistad en plena naturaleza

Cáritas Madrid. 30 de agosto de 2018.- Seguimos en marcha… esto supone que en este verano no paremos, así que los residentes de la Casa de Acogida "San Agustín y Santa Mónica", con su directora y dos educadoras, han decidido coger la furgoneta y poner rumbo a las Piscinas de Riosequillo, en Buitrago de Lozoya. Sin duda, estamos pasando un verano con altas temperaturas no hace falta decirlo, y en este mes de agosto, ni la bajada de afluencia de gente por las calles de Madrid nos ha aliviado.

Dicho esto, el sábado salimos dispuestos a disfrutar de un día lleno de expectativas, alegres y con ilusión, estas dos características siempre nos acompañan.

Con nuestra nevera portátil llena de ricos bocadillos y refrescos, y otras tantas cosas que nos ha preparado Manuela, la voluntaria, dispuestos a pasar el día.

El día espectacular, y como nos alejamos de la gran ciudad, la temperatura más fresquita. Nada más llegar, buscamos una buena sombra que nos acompañase y los más valientes se tiraron de cabeza a la piscina, y tantas fueron las ganas de alguno que se tiró al agua con cajetilla de cigarros incluida…

Un día donde disfrutamos de la naturaleza, bordeados de las montañas de la Sierra de Guadarrama, de refrescarnos en las piscinas, compartiendo experiencias de vida y juegos…

Por la tarde, antes de volver, paramos en Buitrago de Lozoya, paseando por sus calles medievales y admirar la belleza de su muralla custodiada por el río Lozoya, y como no podía pasar desapercibido, una parada para saborear un buen café.

Ya cansados, cenamos en Casa comentando el día y esperando la próxima salida para convivir todos juntos, reforzando nuestros lazos de familia y de amistad que poco o poco se van consolidando.